MLR Forestal capacita a comunidades vecinas en prevención ante desastres naturales

Fidel Sequeira, poblador de la comunidad Bethel #2 en Siuna, recuerda que al acercarse el huracán Eta (que golpeó el Caribe en noviembre de 2020), «la gente no creía que iba a pasar algo». Y sin embargo, pasó. Él se integró a apoyar a su comunidad.

«Yo era el coordinador de la brigada que se formó con las instituciones y con los otros miembros del equipo estuvimos trabajando. En la Iglesia de Dios, al pastor el viento se le había llevado todo el techo de la pastoral, entonces movimos a la gente a otra iglesia. No se creía que iba a pasar algo así porque desde hace años no había pasado, pero después supimos lo que era un huracán. Incluso mi casa la sacudió el viento, pero como está en una parte alta gracias a Dios no pasó nada. En la iglesia evacuamos a siete personas, en otra casa a doce y en el caserío al otro lado del río, se evacuaron a dos familias», rememora el comunitario.

Ha sido ante la posibilidad de que una situación de emergencia como esa vuelva a ocurrir que MLR Forestal se ha centrado en la educación de sus sectores aledaños para preparar planes de prevención ante desastres naturales.

Una actitud vigilante para la prevención ante desastres naturales

Cinthya Córdoba, encargada de Certificaciones de MLR Forestal dice que «a finales de abril estuve revisando los datos meteorológicos para este año y me di cuenta de que tienen similitud con el año 2020. Yo me quería enfocar en que las comunidades vecinas tengan la visión de lo que podría pasar de nuevo para que ahora no nos agarre desprevenidos, sino que tengamos un plan para evacuación, brigadas y más conocimiento de lo que podemos hacer antes, durante y después de estos eventos», explica.

Trabajo en equipo para garantizar la seguridad

En la escuela de Bethel #2, los encargados de Gestión Social, Higiene y Seguridad y Certificaciones de MLR Forestal se reúnen con los pobladores para hablarles acerca de las emergencias climáticas que podrían sufrir (huracanes, inundaciones, deslizamientos de tierra) y organizar junto a ellos un plan de emergencias. Las 21 personas participantes identificaron los puntos más expuestos de la comunidad y escogieron al jefe de brigada, jefe de albergue y jefe de evacuación.

Francisco Acuña es el jefe de brigada de Bethel #2. Él resaltó la importancia de organizarse para evitar situaciones de peligro pues en el poblado «hay una quebradita que en un segundo se llena. Hace unos días una familia no podía cruzar y decían que tenían que irse porque se estaba haciendo noche, entonces les dije que los iba a pasar con un mecate y eso se tuvo que hacer».

Cinthya Córdoba manifestó que las personas «están colaborando bastante, por ejemplo, en la comunidad de San Miguel que queda prácticamente incomunicada cuando crece el río La Bú, ya tenemos las zonas de seguridad, los albergues y ya se conformaron las brigadas. Ahora el área de monitoreo y mensura de la empresa nos apoyará con mapas para que la población tenga las coordenadas de los albergues».

Finalmente, Mabel Lazo, responsable de Gestión Social informó que MLR Forestal está trabajando en conjunto con los bomberos para que visiten las casas y lugares elegidos como albergues para valorar que cuente con las condiciones necesarias para las personas si sucede algún desastre natural.