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¿Por qué en MLR Forestal no se mata a las serpientes?
Los diez colaboradores del área de vivero de MLR Forestal observan con atención la pantalla. En ella aparecen diferentes especies de serpientes o culebras, algunas muy familiares para ellos, como la temida «barba amarilla». Róger Mendieta, encargado de biodiversidad de la empresa, rememora ocasiones en que en diferentes terrenos de MLR se han encontrado estos animales. «La gente lo primero que hace es matarlos, ¿verdad?», pregunta a los participantes de la charla. Ellos asienten.
Esta presentación compartida a ochenta colaboradores del vivero distribuidos en grupos de diez, fue una manera de educar a las personas en cuanto a las especies de serpientes, sus características y si son venenosas o no para evitar que las eliminen.
Francisco Hernández, colaborador del vivero, tiene varias historias con estos reptiles. Cuenta de que una vez «se enfrentó» a una serpiente que medía más de un metro, también de cuando se ha encontrado «a una cafecita» entre las bolsas con sustrato que se utilizan en el vivero. «Cuando se me han presentado de sorpresa las he matado, pero cuando no me sentía en peligro, las dejaba ir», detalla Hernández.
«Muchas especies de serpientes son beneficiosas»
En Nicaragua hay 107 especies de serpientes o culebras de las cuales solo trece son venenosas. En MLR Forestal hay 47 especies de reptiles y 21 especies de anfibios. Dentro de los reptiles, en la empresa se encuentran 13 especies de serpientes de las cuales solo son venenosas la «barba amarilla», la falsa barba amarilla y el coral verdadero.
Durante la charla, Mendieta explica que, si la vida no está en peligro, no se deben matar a las serpientes o culebras porque cumplen un rol muy importante ya que son las que regulan las poblaciones de roedores. «Por ejemplo, si una especie de culebra se extinguiera, como por ejemplo la barba amarilla, esto provocaría una serie de problemas tanto de salud como en los ecosistemas porque muchas poblaciones de roedores crecerían en población porque no tendrían depredador natural», puntualiza.
La presentación transcurre aclarando mitos acerca de especies como la «víbora de sangre» y las diferencias entre el coral falso y el coral verdadero (el coral verdadero tiene bandas rojas con anillos amarillos en cada extremo, mientras que el falso coral tiene bandas rojas con anillos negros en cada extremo). «Para muchas personas hablar de culebras es desencadenar una serie de mitos porque piensan que todas son venenosas, pero no todas los son, de hecho muchas son muy beneficiosas para la salud humana y de los ecosistemas», finalizó Mendieta.
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