MLR Forestal será pionera en restauración ecológica en Nicaragua

MLR Forestal llevará sus áreas de conservación a otro nivel gracias a la restauración ecológica. “Una restauración ecológica no es lo mismo que una reforestación. Se trata de sembrar árboles como estructura para regenerar toda una cadena alimenticia y una comunidad ecológica que te va a dar servicios ambientales a la vuelta de unos tres, cuatro, cinco años”, explica el ecólogo Fabio Buitrago, encargado del proyecto.

Los servicios ambientales a los que Buitrago se refiere son retención del suelo ante la erosión, aumento de la infiltración de agua en el subsuelo, permanencia del agua superficial incluso en los meses más secos, regulación de la temperatura e incremento de la biodiversidad. El especialista profundiza en que la consecuencia de estas mejoras derivará en “un servicio de ecosistema fuente porque esas zonas se convierten en islas de bosques en medio de una matriz que está completamente deforestada porque la mayoría del territorio está dedicado a la ganadería. Entonces la biodiversidad de toda esa zona encuentra en las áreas de conservación de MLR una especie de oasis donde refugiarse, incluso en situaciones extremas como huracanes o sequías”.

Esta restauración ecológica tuvo como base un estudio realizado por el Centro Humboldt entre noviembre de 2021 y febrero de 2022. El estudio estableció 16 parcelas permanentes de monitoreo que tienen un kilómetro cuadrado de extensión y se levantaron para conocer su estado actual y poder monitorear el progreso a medida que el plan de restauración ecológica avance.

Una propuesta ambiental inédita en el país

Buitrago comenta que para desarrollar esta iniciativa ha usado como referencia proyectos en México, Costa Rica, Estados Unidos y España, pues “lo que estamos proponiendo es algo que yo creo que en el país no se había visto antes porque MLR busca invertir y llevar a cabo acciones estratégicas para acelerar el proceso de regeneración de sus áreas de conservación y me atrevería a decir que no hay otra empresa en Nicaragua que esté haciendo eso”, afirma el ecólogo.

La visión de la restauración ecológica se enmarca tanto en el mediano como en el largo plazo. Avanzando quince años en el futuro, en el año 2037, “MLR se está asegurando tener biodiversidad, conservar los suelos, el agua y además tener interconectividad con otras áreas que pueda haber alrededor. Esto le va a favorecer incluso en sus plantaciones porque va a aumentar la polinización del cacao y el control de plagas gracias a que habrá un ecosistema más diverso”.

Restaurar, monitorear y educar

Para empezar con este “abono de la cadena alimenticia”, como lo llama Buitrago, ya se han planteado una serie de acciones estratégicas:

1. Seleccionar esas áreas donde se va a restaurar, priorizando las riberas de los ríos y las zonas con pendiente de más del 35 por ciento. Debido a que restaurar las zonas de ribera protege las fuentes de agua, mientras que proteger las áreas con pendiente favorece la cobertura vegetal, la infiltración de agua y ayuda a reducir la erosión de los suelos producto de la escorrentía natural de la lluvia.
2. Definir las especies típicas de la región de Siuna con las que se va a restaurar. Serán más de treinta especies, entre ellas el genízaro, carao, capulín, jocote jobo, chilamate, laurel, ojoche, roble, madero negro, entre otros, que tienen diferentes funciones ecológicas, entre ellas servir de alimento a la fauna silvestre.
3. Producir las plantas en el vivero de la empresa. Esta labor al igual que las dos anteriores ya se está ejecutando.
4. Preparar los terrenos donde se va a sembrar.
5. Sembrar las plantas. Un trabajo que espera empezar a realizarse a partir del mes de junio.
6. Monitorear la restauración. Y así valorar el incremento en la biodiversidad, en el volumen de agua y en el mejoramiento de su calidad.
7. Involucrar y educar a las comunidades vecinas en la protección de las áreas de bosque, tanto las ya existentes como las recién sembradas.