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MLR Forestal conmemora el Día Mundial de los Anfibios protegiendo a 21 especies
En el año 2004 la Unión Mundial para la Conservación de la Naturaleza (CITES) evaluó de forma global la situación de los anfibios y reveló que entre un tercio y la mitad de ellos están en peligro de extinción y que unas 120 familias de esas especies ya han desaparecido de la Tierra. Fue por estas razones que el organismo declaró el 28 de abril como Día Mundial de los Anfibios.
La idea de declarar un Día Mundial de los Anfibios es promover la reflexión acerca del riesgo en que se encuentran estos animales y divulgar el conocimiento sobre su diversidad.
En Nicaragua se han reportado alrededor de unas 75 especies de anfibios pertenecientes a tres grandes grupos: los anuros, los urodelos y los cecílidos. En las propiedades de MLR Forestal se han enlistado 21 especies de anfibios en los diferentes estudios que el departamento de Biodiversidad de la empresa ha llevado a cabo.
El proyecto de restauración ecológica aumentará las especies de anfibios
La restauración ecológica de MLR Forestal iniciada en 2022 será beneficiosa para los anfibios. La meta es que al 2037, producto de las acciones de restauración ecológica y recuperación de áreas degradas, habrán aumentado las especies de anfibios en un 20 por ciento.
Esto se logrará con el mejoramiento de plan de monitoreo y gestión de la biodiversidad, la definición de mecanismos y recursos para el monitoreo de la diversidad biológica, el mejoramiento de base de datos sobre la biodiversidad en las propiedades de la empresa, las alianzas con universidades regionales, nacionales e internacionales para el desarrollo de monitoreo y el registro y divulgación de principales hallazgos anuales sobre la diversidad biológica.
La visión de la restauración ecológica se trata de sembrar árboles en áreas degradadas que en esta primera etapa tendrán una importante función ecológica porque son especies que sirven de sombrilla, comederos y hospederos con el objetivo de regenerar toda una cadena alimenticia que active la biodiversidad tanto en el mediano como en el largo plazo.
Avanzando quince años en el futuro, en el año 2037, «MLR se está asegurando tener biodiversidad, conservar los suelos, el agua y además tener interconectividad con otras áreas que pueda haber alrededor. Esto le va a favorecer incluso en sus plantaciones porque va a aumentar la polinización del cacao y el control de plagas gracias a que habrá un ecosistema más diverso”, expresó Fabio Buitrago, encargado del proyecto.
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